Documental sobre Weblogs: Entrevista a Fabio Baccaglioni

En el día de ayer realizamos la segunda entrevista para el documental que como muchos de ustedes ya saben, venimos desarrollando ya hace algúnas semanas. Como el titulo lo dice, el entrevistado fue Fabio Baccaglioni (www.fabio.com.ar).

Para quienes tenemos el agrado de conocerlo, sabemos que es hombre de pocas palabras, serio, callado, tímido y vergonzoso. Nos costó muchísimo lograr que dijera una frase completa con más de 10 palabras y que se soltara frente a la cámara.
MENTIRA!, no sabíamos como decirle que dejara de hablar!. Le buscábamos el cable para desconectarlo porque es impresionante lo que habla ese muchacho. Se nos termino la cinta y el tipo seguía hablando!. Impresionante.

La verdad Fabio, te pasaste, el material que nos brindaste, la excelente predisposición y buena voluntad para colaborar con el documental fue grandiosa.

Nos recibió en su casa, decidimos hacer la filmación frente a su PC. Estábamos medio ajustados de espacio, en un momento le dijimos de que se pasara a la maquina que verán en las fotos a sus espaldas, pero recibimos como respuesta un NO rotundo y determinante que nos obligo a preguntarle «por qué?». A lo cual él respondió, «porque esa maquina usa Windows! y por favor no pidan que ensucie mi reputación saliendo en cámara usando ese sistema operativo».

Por supuesto lo entendimos perfectamente y tratamos de hacer los ajustes necesarios para el plano tan cerrado que debimos usar.

Así y todo salio perfecto. Lo mas importante, las respuestas a las preguntas que mi compañera y periodista Marcela Carou le iba haciendo. Fueron buenísimas, con un contenido rico en información y demás está aclararlo, viniendo de Fabio, super abundantes.

Javier Mauro, mi otro compañero (productor de cine y televisión), hizo malabares con la cámara para poder lograr un buen plano y enmarcado de la imagen, pero lo pudo superar. Eso fue lo que demostraron las imagenes luego vistas.

Nuevamente gracias Fabio por tu tiempo, por abrirnos la puerta de tu casa y recibirnos tan amablemente.